El mundo cambió y los que vivimos en él también, es de suponer que los seres humanos nos adaptamos al cambio o le hacemos resistencia con sus consecuencias. Con motivo del desarrollo del torneo de fútbol de la copa américa en Estados unidos, hay una demostración de la anterior premisa, James Rodriguez, ídolo de nuestro fútbol, brilla con luz propia como el mejor jugador del torneo, mostrando el jugador número 10 que cuando se lleva este número icónico del fútbol, hay que ser un líder influyente y superlativo en el equipo, no quedando menos la banda de capitán, convirtiéndose en un gestor y creador de juego como solo un artista puede hacer su mejor obra, todo un maestro del balón, haciendo de las jugadas fantasías puras como solían hacerlo los que llevaban la número 10, James es eso, tal vez el último de 10 que hay en fútbol de élite mundial, y no lo afirmo por folklorismo, si no por la forma inapropiada con la que han tratado a James: Los técnicos de sus últimos equipos lo han enviado al banquillo privandolo de lo que más le gusta hacer, jugar al fútbol, los futbolistas de sus clubes no lo valoran como si lo hacen sus compañeros de selección, los dueños de los mejores equipos del mundo no le dan el verdadero valor de una joya única., los periodistas deportivos solo hablan de sus adversidades personales y deportivas, y no le reconocen sus bondades únicas en el fútbol, sin embargo el último y verdadero 10, nuestro James no está solo, niños y adultos, mujeres y hombres, ricos y pobres, en general todas las personas que gustamos del buen fútbol, estamos con él, creemos en él, y lo apoyamos muy a pesar que el futbol cambio, se volvio un negocio de apuestas, solo de un juego buscando resultados, de estrategias y tácticas, un laboratorio de rendimiento y resistencia física, un medio de intrigas y decisiones arbitrarias usando el var, en medio de todo esto sigue James jugando líricamente, con el talento y liderazgo que tienen todos los jugadores que llevaron la 10 como Pelé, Maradona, Platini y nuestro Pibe Valderrama, que en cada pase, jugada y Gol hacían del fútbol un espectáculo único, en donde los jugadores fuera de serie cómo James con el 10 en las espaldas, deben seguir, así el mundo cambie y el fútbol también lo haga.